Hoy celebra en el estado Mérida el 414° aniversario de la fundación de la
población de Bailadores, portal occidental de la cordillera andina,
que hoy se erige como enclave agrícola y turístico regional venezolano, y
otrora escala obligada en el tránsito de la historia a Mérida.
Ubicado en estribaciones de Los Andes, unos 96 kilómetros al suroeste
de la capital merideña, entre el páramo Los Carreros y los páramos
Batallón y La Negra, Bailadores atesora en su nombre la rebeldía y
resistencia aborigen frente a los conquistadores.
"Su nombre, puesto por los españoles, deriva de la manera como los
indios presentaban combate. Antes de la batalla, los aborígenes
ejecutaban pasos de danza, que llamaron la atención de los
conquistadores. Por eso los llamaron bailadores", comenta Marco Vinicio
Salas, en su libro Encantadores Pueblos de Mérida.
Ese gesto de prestancia y arenga colectiva se rescata de la historia
para enaltecer la resistencia de la nación aborigen sometida por fuerza
de sables y pólvora, para conformar el poblado a partir del 14 de
septiembre de 1601, por designio del Rey de España, representado por el
capitán Luis Martín Martín.
La historia en su evolución transitó por Bailadores con rumbo a
Mérida, de la mano de la insurrección anticolonialista de los comuneros
en 1781, con la campaña admirable en 1813 y con la Revolución
Restauradora en 1899.
El poblado de unos 20.000 habitantes es la capital del municipio
Rivas Dávila, en honor al prócer merideño Luis José María Rafael Rivas
Dávila, mártir independentista en la Batalla de La Victoria, ocurrida el
12 de febrero de 1814.
En su tierra, la misma que estremecieron los talones de guerreros en
danza de combate, hoy se erige un poblado que es encrucijada de casas
coloniales y contemporáneas, un espacio donde confluyen los encantos de
la cordillera y la entrega del hombre a la tierra.
Verduras, hortalizas, frutas y tubérculos salen de sus cosechas con
rumbo a los estados occidentales y centrales venezolanos, pero sus
montañas productivas también son fuente que nutre al turismo.
Un Santuario Diocesano de estilo gótico – románico, erigido a Nuestra
Señora de la Candelaria; la tradicional plaza central de poblados
españoles levantada en plaza Bolívar tras la independencia, la histórica
casa Los Belandrias, donde pernoctó el Libertador; el Museo de Historia
y Tradiciones Dr. Humberto Barillas e infinidad de bellezas naturales
adornan este poblado emblemático de las estribaciones de la cordillera
andina.
EL SABER DE NUESTROS PUEBLOS Y SU HISTORIA
FACILITADORES:
KELIZ MARQUEZ
JESUS CHACÓN
No hay comentarios.:
Publicar un comentario